“Tijuana está a punto de vivir los tres mejores años de su historia”, afirmó con determinación Ismael Burgueño, el presidente municipal electo de Tijuana, durante un encuentro con los medios. A pocos días de asumir su cargo, Burgueño ha dejado claro que su visión para la ciudad fronteriza es audaz y transformadora. Con un enfoque en la educación, la prevención del crimen y una infraestructura innovadora, su gobierno promete ser un parteaguas en la historia de la ciudad.
En el tema de seguridad, su enfoque es un cambio radical al apostar por un “esquema de prevención” que, con una visión humanista, prioriza la educación, el deporte y la cultura como pilares para combatir la delincuencia desde sus raíces. Es un líder que entiende que la verdadera seguridad comienza por atender las necesidades de la juventud y brindarles oportunidades.
El próximo presidente municipal también tiene claro que la fuerza policial debe ser mejor valorada y capacitada. Con su liderazgo, los policías de Tijuana no sólo tendrán mejores herramientas para proteger a la ciudadanía, sino también la certeza de que sus derechos laborales serán respetados y que estarán debidamente preparados para actuar con profesionalismo y respeto a los derechos humanos.
Burgueño sabe que la tecnología será fundamental en esta nueva era de Tijuana. Bajo su mandato, la ciudad se beneficiará con la implementación de cámaras de vigilancia de última generación, drones y más luminarias que garantizarán una mejor seguridad para todos.
Pero su visión va mucho más allá de la seguridad. En el ámbito educativo, su plan es ambicioso: la creación de una universidad municipal enfocada en ingeniería y tecnología al este de la ciudad, un proyecto que colocará a Tijuana a la vanguardia del desarrollo académico. Además, ha asegurado que se firmarán convenios para que los egresados encuentren empleo de manera inmediata, generando un círculo virtuoso de educación y progreso.
Bajo su liderazgo, la cultura y el arte no quedarán fuera del proyecto de ciudad. Burgueño entiende que para mejorar el tejido social, es esencial invertir en actividades que enriquezcan a la sociedad. Con iniciativas como la creación de murales públicos en colaboración con artistas locales y la construcción de campos de béisbol con apoyo de San Diego, su gobierno demostrará un compromiso profundo con el bienestar social.
Las mejoras en infraestructura no serán menores. El desarrollo de vialidades será clave para apoyar a la industria local, que juega un papel vital en la economía de la ciudad. Además, la creación de un Consejo Consultivo Empresarial será un paso crucial para fomentar una relación cercana entre gobierno y empresarios, asegurando el crecimiento económico de la región.
“Mi apuesta es que trabajemos todos juntos, desde cualquier trinchera. En Tijuana, tenemos que unirnos para lograr el cambio que todos anhelamos”, declaró Burgueño, demostrando una convicción clara de que la ciudad requiere la colaboración de todos sus sectores para avanzar.
Bajo su mandato, Tijuana no solo mejorará en aspectos físicos y económicos, sino también en lo tecnológico, con la digitalización de trámites que facilitará la vida tanto de residentes como de inmigrantes. Además, proyectos como convertir la Avenida Revolución en un andador turístico y potenciar el turismo médico impulsarán la ciudad hacia una era de modernidad y desarrollo.
El lema de su gobierno, “Tijuana, responsabilidad de todos”, refleja su compromiso de que cada ciudadano, empresario y funcionario debe hacer su parte para garantizar el bienestar de la comunidad. Sin duda, con Ismael Burgueño al mando, Tijuana se dirige hacia una época de esplendor y prosperidad sin precedentes.
